Trasteando: Cambio de Filtro de Aire y Habitáculo a un Fabia 1.2 Tricilíndrico

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Manejo de Herramientas: Miniherramientas multifunción

Vamos a hacer un seguimiento sobre el uso de estas máquinas, imprescindibles en cualquier caja de herramientas. Enfocaremos este artículo hacia el modelismo, pero estas máquinas tienen una gran versatilidad debido al gran número de accesorios existentes en el mercado, que la hacen útil en infinidad de circunstancias.

Son muy bien útiles también para taladrar placas para circuitos, trabajos de precisión, etc.

¡¡ Ya queda menos !!

Esta entrada no huele a carburantes, ni nos pueden dar chispazos, pero es que llevaba 10 años esperando a ver esto:

Otra forma de moverse: ¡¡guardando anillas de latas de refresco!!

Pues sí, hoy en la versión digital del ABC y en algunos portales sobre el tema podemos encontrarnos un artículo en el que se cuenta como un profesor y un alumno han desarrollado como Proyecto Final de Carrera un coche Radio Control que funciona con aluminio y sosa caustica.

Misterios de la vida: SEAT Toledo

Cuando alguien diseña algo para posteriormente sacarlo al mercado e intentar obtener beneficios con ese producto, su éxito dependerá de muchísimo factores y dependiendo de a qué público vaya dirigido o la finalidad de dicho artículo entre otras muchas cosas, harán que triunfe o no. Pero ¿y si no se busca un éxito directo?

En este caso, vamos a tratar como no, sobre el mercado automovilístico, y para ser más concretos, en el diseño y lanzamiento de algunos coches. Vamos a ir analizando varios modelos y a intentar de encontrar una explicación a ese por qué. Todos ellos con un dudoso éxito comercial al menos en España.

Empezaremos por la "de casa", por SEAT. Allá por Marzo del año 1991, recién comprada por el grupo VAG, la marca de Martorell presentaba una berlina con unos acabados y un diseño poco vistos antes en un SEAT. Era una época en la que había que posicionarse de forma clara en el mercado, por eso, sabiendo dónde tenía que estar, el SEAT Toledo siempre fue la alternativa económica al Volkswagen Passat: algo más pequeño, más sencillo, pero igual de capaz a niveles prácticos

Vamos a fabricarnos el cableado para el Tempomat

En este primer post en sí, vamos a ver cómo hay que interconectar los cables necesarios para poder instalar a posteriori el Tempomat.
El Tempomat no es ni más ni menos que el nombre que da el Grupo V.A.G. al control de velocidad de crucero.

Este manual vale Audi A3 8L, Golf IV y SEAT León 1M. Es posible que en otros coches del grupo de la misma época sea lo mismo, pero eso no lo tengo comprobado
 

Pero antes de meternos en materia, vamos a ver algo más sobre este sistema.

Funciona de la siguiente manera: una vez alcanzada la velocidad deseada siempre que sea superior a 40 km/h, pulsamos el botón "-" de la maneta. De este modo mantendremos la velocidad sin necesidad de pisar el acelerador. El sistema se desactivará en el momento en que pisemos el freno, el embrague, si superamos la velocidad memorizada en x km/h durante cierto tiempo o si desconectamos desde la maneta dicho sistema.

Por algo hay que empezar...

Bueno pues para ser el primer post, ¡no queda otra que presentarlo! Las temáticas que trataremos en él, algo sobre mí, el enfoque que le daremos a los temas, la forma de hacer las cosas, etc.

Pero ya que empezamos, hagámoslo desde el principio, por el título del blog: “Ingenieros de Carne con Papas”. Es una expresión que he tomada prestada a uno de los pocos profesores que he tenido durante los ya demasiados años que llevo en la facultad. Según él, un Ingeniero está entre un Espartano y un Elfo Noldor, o casi, y tiene que saber de todo. Y digo pocos profesores no porque sólo tenga cinco o seis que se repartan todas las asignaturas, sino que lo que dice la RAE sobre lo que es un profesor, en la mayoría de los casos, no se cumple. Tenemos varios tipos: los que dominan la materia pero no saben enseñar (el 90% de los casos) y por consiguiente, los que saben enseñar pero no dominan la materia (pocos, pero los hay); luego están los que dominan la materia y saben enseñar, como es el caso del profesor al que cito. Y para terminar, los que ni saben dar clases, ni saben de lo que la están dando (todos sabemos de un profesor con apellido de tejido automovilístico…).